DIFICULTADES Y TRASTORNOS DEL APRENDIZAJE
¿Notas que a tu hijo o hija le cuesta leer, resolver problemas de matemáticas, tiene muchas faltas de ortografía, no es capaz de memorizar o le cuesta mucho mantenerse concentrado al estudiar? Seguramente sufra algún problema de aprendizaje y necesite ayuda. Tenemos +15 años de experiencia en reeducaciones psicopedagógicas y podemos ayudar a tu hijo o hija de forma eficaz e impedir que la situación se agrave.
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TRASTORNOS Y PROBLEMAS DE APRENDIZAJE
Dificultades de aprendizaje
Las reeducaciones psicopedagógicas son un servicio destinado a niños/as y adolescentes con problemas en el rendimiento escolar como consecuencia de un trastorno del aprendizaje (dislexia, discalculia, disortografía, TDAH) y/o falta de hábitos y motivación.
Con la finalidad de intervenir sobre los efectos negativos de problemas de atención, concentración, planificación y organización en relación a su aprendizaje y competencia académica, incluyen objetivos como:
- Recuperación de los aprendizajes: lectura, escritura, cálculo, matemáticas…
- Planificación y organización: agenda, horarios de estudio, carpeta, apuntes…
- Técnicas y métodos de estudio: pre-lectura, lectura, subrayado, resumen, esquema y estudio.
- Preparación de exámenes: (pre-durante-post)
- Mejora de la motivación y la autoestima ante las tareas escolares
- Implementación de las conductas adecuadas (estar sentado en la silla, acabar las tareas, pensar antes de responder…) y reducir/eliminar las conductas poco adecuadas (comentarios fuera de lugar, levantarse constantemente, no seguir las instrucciones, chillar…)
- Psicólogas y Psicoterapeutas con habilitación Sanitaria Colegiadas
Horario muy amplio
Puedes venir cuando te vaya mejor, por la mañana o por la tarde.
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¿Cómo sé si mi hijo/a tiene algún problema de aprendizaje y necesita ayuda?
Para saber si vuestro hijo o hija necesita ayuda psicopedagógica, es necesario que tratéis de detectar si existe alguna de las siguientes señales de alarma que pueden indicar la presencia de alguna dificultad de aprendizaje:
¿Tu hijo/a no puede seguir el ritmo de la clase?
No entiende bien lo que le explican en el colegio, no consigue aprender lo que le enseñan.
¿Te parece que no comprende lo que lee?
No puede responder las preguntas de un texto o si le preguntas no sabe decirte lo que ha leído.
¿Consideras que tarda mucho tiempo en terminar sus deberes?
Le cuesta demasiado esfuerzo entender las tareas y aprender los temas que tiene que estudiar.
¿Crees que tu hijo o hija comete muchas faltas de ortografía?
O escribe todo seguido, sin separar bien las palabras.
¿Notas que a le cuesta leer sobre todo en voz alta?
Lee despacio, comete muchos errores, no respeta los puntos ni las comas...
¿No comprende bien y no sabe resolver problemas matemáticos?
No sabe qué operación tiene que hacer ni tampoco cuáles son los datos importantes.
¿Qué mejoras experimentará tu hijo con dificultades de aprendizaje?
Las reeducaciones psicopedagógicas tienen, entre otros el objetivo principal de permitir al niño o adolescente sentar las bases para el adecuado aprendizaje de los contenidos académicos futuros. Con nuestra ayuda, el niño o niña conseguirá:
Mejorará su atención, memoria, razonamiento, capacidad de cálculo, comprensión lectora… lo cual supondrá que poco a poco irá mejorando su rendimiento académico.
Aprenderá estrategias para afrontar situaciones de evaluación como exámenes, trabajos y exposiciones.
Aumentará su autoestima y su seguridad en sí mismo/a, ya que se irá viendo capaz de aprender y seguir el ritmo de la clase, a la vez que adquirirá la capacidad de gestionar emociones y afrontar problemas.
Desarrollará completa autonomía a la hora de estudiar y organizarse, ya que dispondrá de nuevas técnicas.
También dotamos de estrategias a los padres para que podáis ayudar a vuestro hijo/a en las tareas escolares en las que os necesite.
REEDUCACIONES PSICOPEDAGÓGICAS EN BARCELONA
¿Qué son las reeducaciones psicopedagógicas?
El término “reeducar” hace referencia a educar o enseñar algo nuevo. Así pues, la reeducación psicopedagógica significa enseñar estrategias para obtener mejoras en el rendimiento académico en aquellas áreas en las que no se ha obtenido el resultado adecuado con una enseñanza previa por el motivo que sea.
«Ayudamos a tu hijo/a a superar sus dificultades de aprendizaje»
El objetivo principal de las reeducaciones es intervenir sobre los efectos negativos de problemas de atención, concentración, planificación y organización en relación a su aprendizaje y competencia académica.
Especialistas en los trastornos del aprendizaje
Los trastornos del aprendizaje forman parte de una de las mayores preocupaciones de los padres. Actualmente, cada vez se conocen un mayor número de casos debido a la mayor preparación de los profesionales en el diagnóstico así como al aumento de la información de la que disponen padres y profesores. Podemos encontrar que entre el 3 y el 8% de los alumnos escolarizados presentan algún tipo de trastorno del aprendizaje. Eso quiere decir que en una clase de 25 puede haber entre 0 y 2 alumnos con algún tipo de dificultad.
En psicología, al hablar de trastornos del aprendizaje nos referimos a las dificultades para poder desarrollar los aprendizajes escolares correspondientes a su edad sin un motivo que justifique dicha dificultad. Es importante destacar que en caso de haber alguna alteración sensorial (ceguera o sordera) así como algún tipo de discapacidad intelectual, la discrepancia entre su rendimiento real y el esperado ha de ser significativa.
Dentro del DSM –V–TR, encontramos tres tipos de diagnósticos orientados a los tres aprendizajes de carácter más instrumental:
- Trastorno de la Lectura (Dislexia): corresponde a un rendimiento inferior al esperado en la adquisición de la lectura.
- Trastorno del Cálculo (Discalculia): dificultad para poder entender y llevar a cabo las operaciones aritméticas básicas (suma, resta, multiplicación y división)
- Trastorno de la Expresión escrita (disortografía): rendimiento inferior al que le correspondería a su edad en la habilidad de escribir. En este sentido podemos destacar una lenta velocidad de escritura o una escritura incorrecta.
Teniendo en cuenta que estamos hablando de aprendizajes es necesario que se haya realizado una educación correcta en el momento de la evaluación para poderlos diagnosticar. Asimismo, es necesario realizar la comparación con los niños de su edad y de la población más similar, ya que de esta manera la comparación será lo más fiable posible.
Destacar que estas alteraciones son de carácter primario, es decir, que no existe un daño cerebral que impida su aprendizaje, sino que más bien está relacionado con la maduración biológica del cerebro. En este sentido, es posible que se pongan al día a partir de un entrenamiento específico para adquirir dichas habilidades y suplir sus dificultades.
Igualmente, uno de los principales problemas de estos trastornos es su comorbilidad con el trastorno por déficit de atención con/sin hiperactividad, presentando una dificultad añadida para poder estar atentos y memorizar los aprendizajes realizados.
Es importante realizar un buen diagnóstico diferencial así como valorar a cada niño en individual para poder destacar sus habilidades y dificultades. De esta manera, en el momento de realizar una reeducación se podrán especificar de manera más individualizada los objetivos a conseguir así como los métodos a utilizar.
Problemas de aprendizaje explicados por nuestra Logopeda y Psicopedagoga
Olga López Carrillo, pedagoga y logopeda de nuestro centro, está especializada en el tratamiento de los problemas de aprendizaje. En esta entrevista nos aclara muchas cuestiones que preocupan a los padres, deshace algunos mitos y nos explica cómo actuar cuando un niño presenta dificultades de aprendizaje.
¿Todos los problemas de aprendizaje tienen como causa un trastorno?
No. Hay niños que, efectivamente, presentan problemas de aprendizaje debido a un trastorno, pero en muchos casos, simplemente hay un retraso en el desarrollo de alguna de las habilidades relacionadas con el aprendizaje.
¿Nos puedes poner un ejemplo?
Sí. Dentro de los problemas de aprendizaje están los de lectoescritura. Cuando el aprendizaje de la lectoescritura todavía no está afianzado porque cada niño es diferente y tiene su propio ritmo de aprendizaje, debemos distinguir si estamos ante una dificultad que tiene como causa un trastorno, como la dislexia, o si se trata de un retraso en la adquisición de alguna de las habilidades relacionadas con el aprendizaje de la lectoescritura.
En este último caso, el niño irá más lento no porque haya una capacidad afectada, sino porque su desarrollo va más despacio en algún aspecto.
No todos los niños desarrollan las habilidades de aprendizaje al mismo ritmo
No, cada niño tiene un ritmo de aprendizaje. Se da como algo establecido que en cada etapa el niño debe haber adquirido una serie de capacidades y esto no siempre tiene por qué ser así. Puede ser que esté desarrollando algunas habilidades a un ritmo normal, o incluso más rápido de lo habitual, y otras a un ritmo más lento. Esto no significa que haya un trastorno.
Actualmente, se habla mucho de la dislexia
Sí, y como he comentado, no todos los problemas de lectoescritura tienen como causa la dislexia. La dislexia es un trastorno del aprendizaje que, en mi opinión, se diagnostica con mucha alegría. Como tiene unos rasgos muy característicos, si se aprecian en el niño, enseguida se pone esta etiqueta.
Sin embargo, los mismos rasgos pueden deberse a un problema en la vista, por ejemplo. Para que haya dislexia tienen que darse una serie de características y una permanencia en el tiempo de este trastorno.
¿Hay que realizar un diagnóstico que determine la causa de las dificultades de aprendizaje?
Sí, porque, aunque a veces hay pistas indicativas, las manifestaciones no siempre son evidentes. Por ejemplo, podemos estar confundiendo un problema de lectoescritura con uno de comprensión.
Por eso lo primero que hay que hacer es un buen diagnóstico que nos diga qué habilidad o habilidades están afectadas, cuál es la causa y si esta causa es un trastorno o un retraso en el desarrollo de alguna de las habilidades relacionadas con el aprendizaje.
Cuando llega un niño al centro por primera vez, ¿Cuál es el procedimiento?
Primero tenemos una entrevista con los padres y con el niño para saber cuándo se inició el problema y cuál ha sido la evolución del paciente hasta ese momento. Es lo que llamamos anamnesis.
También es fundamental ver cuál es la demanda real porque a veces no está muy clara: hay una realidad, que es que el niño tiene problemas en el colegio, pero debemos averiguar por qué los está teniendo.
Quizá las causas son emocionales; es decir, que el problema no está relacionado con las capacidades y habilidades del niño. Pero, a priori, no lo podemos saber. Por eso hay que hacer primero un buen diagnóstico que se lleva a cabo mediante una batería de pruebas.
Consulta gratis lo que necesites saber. Podemos ayudar a tu hijo o hija.
¿Se realiza una prueba de cociente intelectual?
Sí, pero esta prueba no es solo para saber cuál es el cociente intelectual del niño: la realizamos porque incluye pruebas de habilidades relacionadas con el aprendizaje que nos aportan información necesaria para que el diagnóstico sea certero.
El objetivo es ver si todo está compensado: quizá unas habilidades son muy altas y otras no. Lo que queremos saber es en qué punto está el niño. También se realizan pruebas de visio-percepción y la neuropsicóloga realiza otras, como las de atención. Y se hace un cuestionario para determinar si hay algún problema emocional.
A partir de los resultados de esta batería de pruebas se realiza el diagnóstico y se deriva el niño al psicólogo del centro que corresponda.
¿Los problemas de aprendizaje pueden deberse a causas psicológicas?
Sí. Un niño con problemas de baja autoestima o falta de confianza puede tener un rendimiento escolar que no se corresponde con sus capacidades porque las emociones nos influyen mucho, pero en estos casos el aspecto psicológico es una causa secundaria.
Es decir, si a un niño le cuesta centrarse porque está viviendo problemas en casa o tiene miedo a responder en voz alta en clase por falta de seguridad, esto puede perjudicar su rendimiento escolar, pero no porque haya una causa relacionada con lo que entendemos por problemas de aprendizaje.
Los problemas escolares serán una consecuencia del mal ambiente familiar o de esos problemas emocionales. Si resolvemos el conflicto emocional, resolveremos la situación.
Si detectamos que nuestro hijo tiene problemas de aprendizaje, ¿Cómo debemos actuar?
En primer lugar, no debemos alarmarnos ni angustiarnos: afortunadamente, hoy en día casi todo tiene respuesta. Lo importante es llevarle a un especialista para poder hacer un diagnóstico temprano y, a partir de este, empezar a trabajar en su recuperación lo antes posible; tanto si el problema es leve (para que no se agrave) como si es más importante. Pero no hay que dramatizar la situación. Hay que perder el miedo a palabras como “dislexia”.
¿Todavía asusta?
Sí, recuerdo un padre que me dijo: «Entonces, ¿mi hijo tiene la enfermedad de la dislexia?», cuando la dislexia no es una enfermedad.
¿El diagnóstico temprano es clave?
Sí, tengamos en cuenta que la lectoescritura es la base del aprendizaje. Y, aunque es cierto que nuestro sistema educativo actual facilita la integración porque ya no pasa todo el aprendizaje por la lectura y la escritura, es un hecho que ambas tienen un peso importante en todas las asignaturas.
Si no se trata la causa, ¿los problemas se agravan con el tiempo?
Sí, es fundamental actuar lo antes posible para ayudar al niño a pasar las diferentes etapas del aprendizaje de manera óptima. De otro modo, las dificultades se agravan.
¿Cuándo deberíamos empezar a preocuparnos?
En general, si el niño sigue presentando dificultades a los ocho años. De cualquier forma, antes, durante el proceso de aprendizaje de la etapa de educación infantil, ya se pueden detectar signos evidentes.
¿Cuáles son estos signos?
Cualquier anomalía en los aprendizajes básicos que se llevan a cabo durante esta etapa: si el niño no diferencia formas o colores, si no distingue derecha-izquierda, si tiene problemas de concentración, de memoria a corto plazo, de comprensión, etc. Por ejemplo, es posible que el niño lea bien (mecánica lectora preservada), pero que no entienda lo que lee. En este caso el problema no será tan evidente, pero es muy importante detectarlo para intervenir lo antes posible.
También puede ocurrir que al niño le cueste mucho encontrar en su cerebro las palabras: si hemos ido al zoo y luego le preguntamos qué animales ha visto, observaremos que va muy lento al ir nombrándolos; como un ordenador reseteándose.
Si hay un problema de lectura, ¿lo hay también de escritura?
No siempre, ni a la inversa. No obstante, si hay un problema de lectura, hay más probabilidades de que haya también uno de escritura y de comprensión lectora. Si un niño cambia el orden de las letras o de las sílabas al leer, lo más seguro es que las cambie también al escribirlas.
¿Y si observamos un problema en su forma de expresarse?
Si estando la parte de la mecánica lectora preservada, vemos que hay un problema en la forma en que el niño se expresa, puede haber un problema de conciencia espaciotemporal. Son niños que no entienden el concepto de secuencia, por ejemplo, y por esto escriben sin signos de puntuación y sin estructurar el texto en párrafos.
En cualquier caso, hay que averiguar qué está causando la dificultad y también ver qué habilidades están preservadas porque las que están bien nos ayudarán a trabajar las que no lo están.
¿En qué consiste la terapia?
La terapia se adapta a cada niño en función de su edad y del diagnóstico, pero, en general, trabajamos haciendo actividades que activan las zonas neuronales que no están activadas. Con los más pequeños estas actividades se realizan de una manera muy lúdica, como si fuera un juego.
¿La terapia es efectiva en todos los casos, incluso cuando hay un problema neurosfisiológico?
Siempre que se trabaja con el niño hay, cuando menos, una evolución significativa. Siempre hay buenos resultados. En los casos de retraso lo habitual es que la recuperación sea completa. Si hablamos de dislexia, casi siempre quedan algunas secuelas, pero la persona adquiere recursos que le permiten llevar una vida completamente funcional.
¿Qué papel tienen las escuelas en la detección de los problemas de aprendizaje?
Tienen un papel esencial. Un buen maestro detecta enseguida si un niño no está aprendiendo al ritmo esperado. La cuestión es que algunas escuelas no disponen de suficientes recursos para cubrir las necesidades de los niños que van a otro ritmo. Es un hecho que el mundo está hecho para la mayoría, no para las personas que son una excepción.
Y en el aprendizaje ocurre lo mismo: está ideado para la mayoría de los niños, pero no todos los niños son iguales. Desde las escuelas se está haciendo un gran trabajo para adaptarse a las particularidades de cada niño, pero, desgraciadamente, no es suficiente.
¿Qué haría falta?
Más maestros de apoyo y de educación especial porque, aunque una escuela cuente con algún especialista, lo más probable es que no pueda asumir todo el trabajo. Pensemos que si hay cinco niños que requieren una atención especial, cada uno de ellos tiene unas particularidades distintas, por lo que ofrecerles a todos una atención individualizada es, en la mayoría de los casos, imposible. Este es el trabajo que hacemos en nuestro centro: tratar cada caso individualmente.
Es evidente que estos niños necesitan un ayuda profesional y personalizada, pero ¿los padres pueden ayudarles en casa?
Sí, aunque el ritmo de vida actual hace complicado que los padres consigan encontrar espacios en los que poder poner en práctica ciertos ejercicios. Por otro lado, tampoco es conveniente saturar a un niño con tareas: si después de las horas que pasa en el cole, y las que está aquí, le forzamos a seguir haciendo tareas en casa, será contraproducente.
En cualquier caso, depende mucho de cada niño y de cada familia. Lo que sí pueden hacer los padres es aprovechar los espacios de ocio y lúdicos para ayudar en algunos aspectos.
¿Por ejemplo?
Se pueden aprovechar los trayectos en coche para mejorar, por ejemplo, la consciencia fonológica: jugar a decir palabras que empiecen por una letra determinada, jugar a separar las sílabas de las palabras, buscar palabras que rimen, etc. O si el niño tiene dificultades en el aprendizaje de la lectura, podemos aprovechar el tiempo que dedicamos a leerle un cuento antes de ir a dormir para mejorar esta capacidad de una forma lúdica.
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Casos más comunes de problemas y dificultades de aprendizaje
TRASTORNOS DEL APRENDIZAJE QUE TRATAMOS EN BARCELONA
Como psicólogas y psicoterapeutas, habitualmente tratamos una amplia gama de trastornos de ámbito psicológico tanto en adultos como en niños y adolescentes. A continuación te mostramos un listado de los más frecuentes para que puedas acceder a información más detallada.
Dislexia
Es un trastorno del aprendizaje, en el que pueden aparecen dificultades en distintas áreas, aunque destacan los problemas para leer y escribir.
Discalculia
Es un trastorno específico del aprendizaje que presenta dificultades concretas con el cálculo y las matemáticas.
Disgrafia
Es un trastorno específico del aprendizaje, que afecta en concreto a la escritura, ya que supone dificultades para poder escribir bien.
TDAH
El TDAH es un trastorno del neurodesarrollo que afecta a los niños/as en su capacidad para mantener la atención, les genera dificultades de autocontrol (impulsividad) y/o excesivo movimiento (hiperactividad).
Disortografía
La disortografía es un trastorno específico de la ortografía que acompaña a la dislexia en el que la ortografía de las palabras es muy deficiente.
Trastorno Específico del Lenguaje (TEL)
El niño o niña presenta dificultades en el lenguaje, expresivo, comprensivo o mixto.
Trastorno del Aprendizaje No Verbal (TANV)
Problemas para reconocer y comprender patrones en las expresiones faciales, el lenguaje corporal y otros tipos de comunicación no verbal.
Retraso madurativo
Implica retrasos las diferentes áreas del desarrollo: lenguaje, cognitivo, psicomotricidad... Por lo que no están adquiriendo los hitos esperables a su edad.
Trastorno del Espectro Autista (TEA)
El autismo es un trastorno del desarrollo que afecta la manera en la que el niño/a percibe la realidad y se relaciona con otras personas. La psicoeducación trata de facilitar su vida y la de sus padres.
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Preguntas frecuentes
Las reeducaciones son un tipo de intervención educativa que se centra en la corrección o mejora de una determinada habilidad o competencia. Pueden ser necesarias en casos de retrasos en el desarrollo, trastornos del aprendizaje, problemas de conducta o cualquier otra dificultad que impida al niño o niña alcanzar su máximo potencial.
La reeducación en psicología es un tipo de intervención psicopedagógica que se centra en la mejora de las habilidades cognitivas, emocionales y sociales de una persona. Puede utilizarse para tratar una amplia gama de problemas, como el retraso mental, los trastornos del aprendizaje, los trastornos del comportamiento y los trastornos psicológicos.
El psicopedagogo es un profesional de la educación que se encarga de la evaluación, diagnóstico y tratamiento de los trastornos del aprendizaje, el retraso mental y otras dificultades educativas. También puede ayudar a los niños y niñas a desarrollar sus habilidades cognitivas, emocionales y sociales.
El psicólogo se centra en el bienestar emocional y psicológico de la persona, mientras que el psicopedagogo se centra en el desarrollo educativo y cognitivo. Sin embargo, ambos profesionales pueden trabajar juntos para abordar las necesidades de un niño o niña.
Se debe acudir a un psicopedagogo cuando se observen dificultades en el desarrollo o aprendizaje de un niño o niña. Estas dificultades pueden ser de tipo cognitivo, emocional, social o conductual.
La duración de la sesiones es de 45 minutos.
Las reeducaciones psicopedagógicas en nuestro centro de Barcelona pueden realizarse tanto por la mañana como por la tarde. Por favor, consulta nuestra disponibilidad.
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